– El 6 de diciembre es el Día Nacional para movilizar a los hombres para poner fin a la violencia contra las mujeres.
El 6 de diciembre de 1989, Marc Lepine, de 25 años, irrumpió armado en un aula de la Escuela Politécnica de la ciudad de Montreal, Canadá. Ordenó a los 48 hombres presentes que abandonaran la habitación, dejando solo a las mujeres en la habitación. Al grito de “¡Todas sois feministas!”, el joven disparó y asesinó a 14 mujeres, a quemarropa. Luego se suicidó. En una carta dejada por él, justificó su acción diciendo que no soportaba la idea de que las mujeres estudiaran Ingeniería, una carrera tradicionalmente dirigida a hombres.
El crimen movilizó a la opinión pública de todo el país, generando un amplio debate sobre las desigualdades entre hombres y mujeres y la violencia generada por este desequilibrio social. Así, un grupo de hombres de Canadá decidió organizarse para decir que hay hombres que cometen violencia contra las mujeres, pero también hay quienes repudian esta violencia. Eligieron la cinta blanca como símbolo y adoptaron su lema: nunca cometas un acto violento contra las mujeres y nunca cierres los ojos ante esta violencia.
Lanzaron así la primera Campaña Lazo Blanco: hombres para acabar con la violencia contra las mujeres. Durante el primer año de la Campaña, se distribuyeron alrededor de 100.000 corbatas entre hombres canadienses, principalmente entre el 25 de noviembre y el 6 de diciembre, semana que vio una serie de acciones públicas y manifestaciones a favor de los derechos de las mujeres, por el fin de la violencia. El 25 de noviembre fue proclamado por UNIFEM – Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer, como Día Internacional para la Erradicación de la Violencia contra la Mujer. Se eligió el 6 de diciembre para que las muertes de esas mujeres (y el machismo que las generó) no fueran olvidadas.
La Campaña Brasileña del Lazo Blanco tiene como objetivo crear conciencia, involucrar y movilizar a los hombres para trabajar para poner fin a la violencia contra las mujeres. Sus actividades se desarrollan en línea con las acciones de los movimientos organizados de mujeres y otras representaciones sociales que buscan promover la equidad de género, a través de acciones en salud, educación, trabajo, acción social, justicia, seguridad pública y derechos humanos.
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